El inicio del movimiento internacional de unificación de principios acontece en el año 1961 en ocasión de desarrollarse en la ciudad de Paris, la Conferencia internacional sobre principios de catalogación. Esta conferencia se considera un hito importante en la historia y el progreso de la catalogación descriptiva y ha tenido un gran impacto en el desarrollo de los códigos de catalogación posteriores. Sus debates llevaron a un acuerdo histórico, la adopción de una declaración sobre los principios de catalogación, los “Principios de Paris”, basados en gran medida en el trabajo de Seymour Lubetzky, que han de aplicarse en todo el mundo, logrando la uniformidad en los catálogos de bibliotecas y la comunicación del conocimiento. Se reunieron representantes de doce organizaciones internacionales y cincuenta y tres países con el objetivo de discutir y acordar principios aplicables a la elección y forma de los encabezamientos y palabras de entradas en los catálogos de libros impresos, como elementos organizadores que necesitan uniformidad a nivel internacional.
El trabajo comienza con una declaración de las funciones que el catálogo debe cumplir como instrumento eficaz para determinar (Statement of Principles, 1961):
si la biblioteca posee un libro determinado especificado por
su autor y su título, o
si no se nombra al autor en el libro, sólo por el título, o
si el autor y el título son inapropiados o insuficientes para su identificación, un sustituto conveniente del título; y
a) qué obras hay de un determinado autor y
b) qué ediciones de una determinada obra hay en la biblioteca.
Si el catálogo quiere cumplir dichas funciones, deberá contener:
al menos un asiento de entrada para cada libro catalogado, y
más de un asiento de entrada relacionada a cualquier libro, siempre que sea necesario en interés del usuario, o a causa de las características del libro, por ejemplo:
cuando el autor es conocido por más de un nombre o forma del nombre, o
cuando se sabe el nombre del autor, pero no está en la portada del libro, o
cuando varios autores o colaboradores han compartido la creación de la obra, o
cuando el libro se atribuye a diversos autores, o
cuando el libro contiene una obra conocida por varios títulos.
Estos principios están subyacentes en las funciones del catálogo propuesto por Cutter y Lubetzky, la identificativa, la organizativa y la evaluativa, desapareciendo la función de asistencia en el uso de la biblioteca que incluye la localización del documento entre la colección, función que seguramente está subsumida en las propias del catálogo. Los puntos que plantean los Principios redundan en los elementos determinantes del orden en las entradas, su elección y forma: tipos de entrada, uso de entradas múltiples, función de diferentes tipos de entradas, elección del título uniforme, autor personal, entrada bajo entidades corporativas, autoría múltiple, obras ingresadas bajo el título, palabra de entrada para nombres personales. Das (2006:66) expresa que, si bien se consideró que estos Principios eran altamente exitosos en sus resoluciones y objetivos, más tarde fueron criticados por algunas inconsistencias e imprecisiones y porque sus declaraciones no eran funcionales en las distintas tradiciones y prácticas de catalogación.
Visualizar el siguiente video y relacionar su contenido con lo leído en el texto anterior.
Entre todos iremos rescatando los puntos más importantes y elaboraremos una síntesis.